Dos chiringuitos de Matalascañas reciben las primeras concesiones definitivas otorgadas por la Dirección General de Costas

Han llegado a manos de los concesionarios, las dos primeras proposiciones de resolución remitidas desde la Dirección General de Costas en Madrid, aprobando dos chiringuitos, concretamente las relativas a los establecimientos “Tucán” y “Paco Triana”. El Ayuntamiento ya ha respondido afirmativamente a la documentación enviada desde la capital de España. Afirma el responsable de Turismo municipal, Domingo Núñez, que por fin “tenemos el orgullo de decir que contaremos a partir de ahora con instalaciones que podrán estar abiertas todo el año, mejorando la garantía y, sobre todo, asegurando los puestos de trabajo, ya que contarán con una concesión de quince años, totalmente ajustada a la Ley de Costas”.

Con esto, comienza a resolverse una cuestión que comprometía estos negocios turísticos y los puestos de trabajo asociados. “Asumimos con ello el logro de ser la primera playa del litoral andaluz y español que ha llegado a un entendimiento total con la Dirección General de Costas, con lo que seguimos siendo pioneros en conseguir proyectos sociales, generadores de economía y medioambientalmente idóneos. Hemos convencido a esta institución de que en un territorio como es Doñana, queremos que todo se haga siguiendo escrupulosamente la legislación” ha afirmado el responsable político.

Sigue Núñez que, “aunque se han tramitado los veintitrés expedientes y por tanto se trasladaron en su día a Madrid, cada caso particular condiciona que unos se encuentren más avanzados que otros. El resto de establecimientos recibirán su documentación en breve plazo”. Según ha conocido el concejal, “alrededor de otras siete llegarán en los próximos días, y esperamos que todas se hayan recibido en dos meses”.

Los chiringuitos pasarán de tener una concesión al margen de la legislación actual, con un máximo de veinte metros cuadrados para cada instalación, y poder abrir sólo durante el verano, con la obligación consiguiente de desmontarlos y condicionarlos a la precariedad, “a la concesión de establecimientos de 150 metros cuadrados, en los que se puede apostar por la calidad, abiertos todo el año y que pueden crear puestos de trabajo estables y acordes con lo que todos queremos para Matalascañas”, ha sostenido el concejal de Turismo.

Tras dos años de esfuerzo continuado desde que el Ayuntamiento creara una Mesa de Trabajo junto con la asociación de chiringuitos y el Servicio Provincial de Costas, se están recibiendo los frutos de los acuerdos alcanzados anteriormente. Desde la institución local, se quiere agradecer a los concesionarios “su trabajo y la renuncia que han hecho algunos a beneficios particulares para obtener compensaciones para el colectivo”.

Del mismo modo, los empresarios han aceptado reducir sus instalaciones a cambio de contar con un marco legal adecuado y estable. La labor del Servicio Provincial de Costas ha resultado también muy meritoria para llegar a este logro final. La problemática en torno a estos negocios se desató a partir del año 2003. Ahora, se resuelve gracias al diálogo y al consenso alcanzado entre todos.

La opinión de los propietarios

Los concesionarios de chiringuitos se han mostrado muy satisfechos por las notificaciones recibidas. Antonio Ángel Ojeda, espera que el resto de los establecimientos obtengan su documentación próximamente. “Desde 2003, hemos estado luchando y sacrificando el espacio que deseábamos para nuestras instalaciones y desde Costas han valorado también nuestra buena intención También ha resultado decisiva la labor del Ayuntamiento”.

Ahora aparece un panorama que aporta estabilidad a las familias. Anteriormente, las concesiones eran de temporada, y se renovaban anualmente. La inseguridad no ayudaba a consolidar inversiones, y los chiringuitos se mantenían en precario. Ahora, se ejecutarán los proyectos que ya están en manos del Ministerio. Capítulo aparte merece el compromiso con los trabajadores, ya que las instalaciones fijas permitirán alargar la temporada y contribuir al mantenimiento de los puestos de trabajo.

Francisco Gil Triana, el segundo concesionario con la notificación en la mano, ha expresado también su contento. “Tras los efectos del temporal de invierno, los arreglos se han adaptado a los 150 metros que indica la legislación. Cuando finalice esta temporada se llevará a cabo un proyecto de primera calidad y definitivo, realizado en madera y en consonancia con playa de Matalascañas”, ha expresado. En cualquier caso, las instalaciones ya esperan a los visitantes en estos días.

Almonte. Viernes, 14 de mayo de 2010.